“UNA SEGUNDA VUELTA ELECTORAL, PARA ELECCIÓN DE PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA”

En el trabajo de investigación que realicé, y que hoy pongo a su distinguida consideración, para el que pido benevolencia al momento de evaluarlo, ya que es la primera investigación que realizo, se enfoca principalmente a la propuesta de que se realice una Segunda Vuelta Electoral, a Nivel Federal, para Presidente de la República, siempre y cuando se hayan realizado las elecciones primarias, y que en las cuales, el resultado obtenido de la votación, sea un margen de diferencia muy pequeño, entre el primer y segundo candidato con la máxima votación, y como resultado de esto, se llevaría a cabo la realización de esta Segunda Vuelta Electoral, y con esta reforma se daría la plena legitimidad al Presidente electo, de las mismas elecciones, lográndose una estabilidad política dentro del país, evitando un clima de desconfianza de todas y cada una de las Instituciones Electorales que participan dentro de este proceso, así como se evitaría la perdida de credibilidad de todas y cada una de las instituciones que intervinieron, y los ciudadanos que emiten su voto, confiarían plenamente en las instituciones y resultados, el día de la elecciones. Esta propuesta de la realización de una Segunda Vuelta Electoral, se llevaría a cabo solamente, cuando sean las elecciones de Presidente de la República que son cada seis años, y por lo cual seria, únicamente a nivel federal, sin que intervenga esta Segunda Vuelta Electoral en ningún otro nivel ya sea estatal o municipal. Esta investigación realizada es de suma importancia, ya que con una Segunda Vuelta Electoral, a Nivel Federal, para Presidente de la República, se lograría dar un gran paso dentro de nuestra política, así como de la propia democracia mexicana, y que con esto se fortalecería a todas las Instituciones Electorales, que participan dentro de este proceso que se lleva a cabo, así como a las Autoridades Electorales que se encargan de emitir sus resoluciones, ya que no se generaría un clima de desconfianza por parte del electorado, dando como resultado credibilidad democrática, y sobre todo, que el ciudadano tenga la plena confianza de que su voto es lo más importante y es su decisión lo que cuenta en una elección